Tema: Mi abuela (o mejor dicho una de ellas)

Cuando era chica en el verano, nos íbamos de viaje a Paraguay, ya que mis padres son de allá. Obviamente esto era una vez por año y aprovechaba el viaje para ir a ver a mis abuelos.
Hoy voy a contarles sobre mi abuela paterna, su nombre… Guillermina, cuando llegábamos con mi hermano era toda una fiesta. Apenas llegábamos nos ofrecía todo lo que tenía a su alcance, imaginen que vivía en el campo y además de criar animales tenia todo tipo de frutas, desde mangos, pasando por guayabas, uvas, naranjas, manzanas, sandias, melones y lo que no tenía lo mandaba a traer. Era tal su adoración por nosotros que era hasta capaz de matar una guinea (es una mezcla entre pavo y gallina que tiene una carne muy rica) y hacerlo en la parrilla que ella misma improvisaba.
Era difícil encontrarla de mal humor, generalmente pasábamos dos semanas con ella, ya que nos íbamos un mes de vacaciones. En ningún momento estaba de mal humor, es mas, creo que muy pocas veces supe de algún problema que haya tenido, siempre pudo tomarse todo bastante bien y pudo afrontarlo.
Cuando mi abuela era joven y mi papa tenia unos 4 o 5 años y estaba embarazada de mi tía, un día mi abuelo (su nombre era Magno pero de magno no tenia un corno) le dijo que se iba al pueblo, si Sres. a comprar cigarrillos, y dejo a mi abuela con un chico y embarazada de algunos meses, mi abuelo nunca mas volvió. Ella podría haberse largado a llorar sus penas, pero eligió seguir en pie por el hijo que tenia y por la beba que iba a llegar en poco tiempo.
Después de tener a su segunda hija, conoció a un hombre, quien después fue mi abuelo Juan, y con el cual vivió mucho tiempo hasta la muerte de este. Tuvo siete hijos más, y se notaba que la más fuerte de la familia y la que sacaba adelante a todos era ella. Siempre fue una clase de motor que levantaba a sus hijos, aunque al principio fue un poco difícil para ella, digamos que lo pudo llevar mas que bien.
Volviendo al tema, siempre que íbamos nos ofrecía hasta lo que no tenia, éramos su adoración, una vez ella hizo muchas cosas para comer, porque justo un cumpleaños mío lo pasábamos con ella, y siempre recuerdo lo bien que lo pasamos aquel día a pesar de la lluvia tropical que vino después.
Era servicial con todos aquellos que llegaban, y para todos ella era Mamamina, y si era una madraza para todo aquel que llegara a su casa.
Ella me contaba muchas historias sobre la familia, sobre mi abuelo una sola historia le escuche decir, cuando mi papa se encontró con el de grande, y no pudo evitar soltar una lágrima al contarme aquel episodio, en el cual ella no estuvo presente, pero lo sintió en el corazón cuando se lo contaron.
Hoy cada vez que voy a Paraguay la extraño, se van a cumplir cinco años de su muerte, y no puedo evitar recordar la ultima vez que la vi, nos tomo a mi hermano y a mi uno de cada lado y a un vecino que estaba por ahí le dijo: “Estos son mis nietos, vinieron desde Buenos Aires solo para verme, y yo estoy muy orgullosa de ellos”. Un año después, esperando a mi papa como todas las mañanas para tomar juntos un tereré, y preparando todo porque su hijo la iba a acompañar como todas las mañanas, se desplomo, fue una muerte rápida, tenia 78 años y una sonrisa en la cara, según contó mi tío, porque su hijo la iba a acompañar como todos los días, mi viejo llego cinco minutos después (mi viejo vive allá hace unos 9 años) y fue al hijo que mas le afecto, no porque no se haya portado bien como hijo, sino porque el la adoraba por todo lo que había soportado y todo lo que había hecho sola por el y su hermana y por todo lo que les había dado y les seguía dando aun ya grandes.
Yo el día que murió no me pude levantar, es como si hubiese presentido su muerte, llegue tarde al trabajo, y al llegar a la oficina recibí el llamado de mi madre que me decía que había muerto hacia un par de horas. Salí corriendo al baño y llore como una nenita chiquita, porque en esas vacaciones iba a ir a verla nuevamente y no me espero con su sonrisa de siempre.Imagino que cuando a mi me toque irme al otro lado, la que me va a recibir es ella y me va a ofrecer hasta lo que no tiene.
Pero me quedo con la imagen de ella riendo y corriendo hacia nosotros cada vez que llegábamos, pienso en eso y me alegra el día aunque no lo crean.

Mamamina te mando un beso enorme y yo también estoy muy orgullosa de vos…



Un beso a todos


PD: hace un tiempo había escrito algo sobre mi abuela y no lo puse acá porque sino iba a ser muy lacrimógeno, así que hoy puse esto espero que les guste.
Y la próxima espero poner lo del viaje a Chivilcoy, es un poco largo pero entretenido, así que preparen el pochocho (¿?)